El clima no ha sido constante a lo largo de la historia. Los registros históricos y geológicos muestran claramente las variaciones del clima, en cuanto a las escalas largas, de varios siglos, están determinadas por eras glaciares e interglaciares.

Columna de Isabel Tagle. Datos extra según referencia.

Lo primero a mencionar, es que el Efecto Invernadero es un fenómeno necesario para mantener el planeta a una temperatura agradable, ya que ésta depende de la cantidad de energía solar que recibe la Tierra y de cuanta libera al espacio exterior. Sin el efecto invernadero tendríamos una temperatura de menos 19 grados Celcius. Por ello, se forma una capa alrededor del planeta, de una mezcla de gases tales como, Vapor de Agua, Oxígeno, Dióxido de Carbono, Metano, Óxido Nitroso y Ozono, además de gases de efecto invernadero (GEI) creados íntegramente por el ser humano, como los halocarbonos (compuestos que contienen cloro, bromo o flúor y carbono, que actúan como potentes gases de efecto invernadero en la atmósfera y son también una de las causas del agotamiento de la capa de ozono).

El clima no ha sido constante a lo largo de la historia. Los registros históricos y geológicos muestran claramente las variaciones del clima, en cuanto a las escalas largas, de varios siglos, están determinadas por eras glaciares e interglaciares.

En lo que va corrido del siglo veintiuno la temperatura media de la Tierra ha tenido los valores más altos de los últimos 130.000 años. Naciones Unidas advirtió que la meta establecida de evitar que la temperatura suba 2℃ por encima de los niveles previos a la revolución industrial corre peligro de no cumplirse.

Las emisiones de dióxido de carbono o C02, el principal gas de efecto invernadero, han aumentado en los últimos años en vez de bajar y las proyecciones actuales de emisiones implican un calentamiento global de al menos 3 grados para fin de siglo.

En la actualidad, la alta concentración de CO2 en la atmósfera, no se debe a un fenómeno natural, sino que se agrega el factor “humano” o antropogénico.

Este cambio se comenzó a gestar en la Revolución Industrial, momento en que la economía dejó de basarse en el agro y pasó a depender de la industria. Con el desarrollo de la tecnología, se inició la era del carbón y el petróleo como combustible, transportes de todo tipo, generación eléctrica a carbón, creció la ganadería, se han quemado y cortado bosques para abrir espacio a la agricultura y vivienda y a poco andar, se inició una era de consumismo desenfrenado que da origen a un extractivismo de igual magnitud.

Si a esto, agregamos el alto crecimiento poblacional de los últimos 61 años, consecuencia de los avances en salud, descubrimientos de las vacunas y antibióticos, baja en la tasa de mortalidad infantil y aumento en la tasa de sobrevivencia, entre 1950 y el 2011, pasamos de 2.600 millones de personas a 7.000 millones según datos de ONU, y condimentamos con la falta de educación a la población y falta de conciencia y protección de la naturaleza de parte de los gobiernos, que preferencian el “desarrollo” al futuro de las próximas generaciones, obtenemos el crítico momento actual.

Hechos y no palabras. Según la BBC, Naciones Unidas urgió a los países del mundo a «quintuplicar sus esfuerzos para que la temperatura del planeta no suba más de 1,5 grados centígrados».

El Informe sobre Disparidad en Emisiones, publicado por ONU Medio Ambiente, compara la brecha entre las emisiones actuales y proyectadas con las que serían admisibles para mantener el límite de 1,5 grados. Y las conclusiones no son alentadoras.

«Hay una enorme brecha entre las palabras y los hechos«, le dijo a la BBC Gunnar Luderer, del Instituto Potsdam de Investigaciones Climáticas en Alemania y uno de los autores del informe. «Hay una enorme distancia entre las metas acordadas por cada gobierno para estabilizar el clima y las medidas que están tomando».

De 2015 a 2018: los 4 años más cálidos de la historia

Para que la temperatura del planeta no suba más de 1,5 grados será necesario que las emisiones globales bajen para el 2030, a un 45% de sus niveles al 2010, según advirtió la ONU.

El texto de referencia es de BBC Mundo, disponible en este enlace.

Las opiniones vertidas en esta columna son de responsabilidad de quien las emite. Y no necesariamente, va de la mano con la línea editorial de Espacio Regional.

Por admin

Deje su comentario en su plataforma preferida